lunes, 30 de junio de 2014

Suesca, Aguantando Frio - Día 1

Oficialmente Suesca, en Cundinamarca, es un municipio conocido por las altas paredes de roca, al borde de una carrilera en desuso, donde aficionados, y expertos de todos los niveles van a practicar escalada, la oferta es variadísima, hay más de media docena de operadores turísticos que ofrecen el plan completo, equipos, guianza, seguridad, y hay quienes se rebuscan a $ 20,000 el pegue, el pegue a la roca... en rutas de escalada que van desde grado 5.1 a grado 5.9, 5.10 en la escala de Yosemite. 

Estos operadores también ofrecen productos para los aficionados a la esclada, Que tiene mucho que ver con el campismo y el trekking; lo mismo, hay de todos los precios y para todos los gustos, en esa ocasión vimos unas botas Mamut de caña alta para crampones automáticos, que venian cubiertas por otra bota de tela impermeable, las vendían por algo asi como $ 800,000 pesos, uno de los clientes allí decía: -Esas son las que quiero, así me toque empeñar el carro.- Y bueno pues que las compre que a la larga del gusto es que se vive, finalmente mi novia compró un saco hecho de polartec, por $ 80,000 pesos, con capota, y no nos tocó empeñar nada!, curiosiamos lo que había allí y luego salimos, los que ya han ido a las rocas reconocerán la tienda porque es la que queda en toda la esquina, donde atiende por lo general un señor que es igualito a Pirry.

No conociamos, entonces estabamos muy a la expectativa, mucha gente joven, familias completas metidas en el cuento, señoras, mascotas, ya frente a las rocas hay una zona de camping, Campo Base (Diego Cangrejo 313 4113981), hay un bueno potrero para armar la carpa, hay un local grande, batería de baños, esta bastante bien, esa vez vimos varias carpas armadas, en ese momento decidimos volver a la esquina de la tienda.

La isabelina era de Ethan, que esta atrás de la carpa cuidando
Allí preguntando y hablando, conocimos a Marlon en el parqueadero al lado de la tienda, Marlon es el dueño de una finca a las afueras de Suesca, quien nos ofreció por un precio bastante razonable su zona de camping, para los que van en plan más cómodo el señor también tiene varias cabañas, una vez allí le pedimos permiso para acampar en la parte alta de la finca, una loma rodeada de pinos, pero con muchas rocas que mas tarde nos incomodarían.

Dejamos las maletas allí en la loma, siempre procuramos llevar una sola maleta cada uno, allí metemos todo lo necesario, carpa una de 3 personas para 3 estaciones, sleepings, cobijas, ropa de cambio, comida, menaje para cocinar, agua, y empezamos a recorrer la zona, habia muchos hongos, grandes, tal y como los ve uno en los cuentos, tallo claro, capucha roja y punticos blancos, lastima no saber cuales son comestibles, me comprometo a aprender y a pasar la voz.

Esa noche cocinamos con una cocineta de alcohol que era lo que teníamos ese momento, en la noche, con frio y con hambre no fue para nada grato esperar a que el alcohol tomara temperatura, se demoró muchísimo en calentar casi media hora luego aprendimos que la carpa no se debe armar en un lugar con muchas piedritas, la espalda sufre mucho, y también aprendimos que es mejor buscar terrenos que no tengan pendiente, ya que hora tras hora en la noche nos hibamos deslizando hacia abajo. 

Por lo demás una noche fria, pero hermosa, estrellada, sin los problemas de la contaminación visual ni las luces de la ciudad, pero en Suesca desafortunadamente hay un problema, la explotación minera, a la salida del pueblo, se alza una gran cúpula de concreto donde se horada el terreno las 24 horas del día los 7 días de la semana, el sonido de la maquinaría que allí funciona se alcanza a escuchar y lástima que las carreteras de acceso al pueblo esten en tan mal estado yo se lo atribuyo a la maquinaria pesada usada por estas minas.

Para continuar leyendo esta aventura has clic Aqui

No hay comentarios:

Publicar un comentario